El artista Christopher Locke tuvo la original de idea de emular en hormigón algunas creaciones tecnológicas actuales, pero como si hubiesen estado miles de años bajo tierra, y hubieran sido extraídas de una excavación arqueológica. Además de esto, en su página incluye una curiosa descripción de las piezas, que imita las que hacemos los historiadores cuando hablamos de un ánfora o una espada recuperada de otra época histórica.
Entre los aparatos representados está la Game Boy, un mando de la Play Station 2, varios de la NES, un Disco Duro o un iPod.