The Last Blade 2 [Pixelbits]
Los sucesos acontecidos en el país del sol naciente entre 1853 y 1867 —según el calendario gregoriano— produjeron una transición del shogunato Tokugawa al periodo Meiji conocida como «Bakumatsu». En ella se dan numerosos cambios tras la llegada del comodoro Matthew Perry al archipiélago japonés. Infinidad de revueltas, guerras civiles y batallas se unieron a diversas modificaciones políticas por todo el territorio nipón, considerándose un movimiento romántico en el amplío sentido de la palabra: una reacción revolucionaria contra todo lo establecido anteriormente. En definitiva, una ruptura con lo clásico.
El propio Nobuhiro Watsuki nos haría llegar a través de las crónicas de su vagabundo más famoso, Kenshin Himura, las consecuencias e importancia de este movimiento para numerosos artistas contemporáneos de Japón. También SNK, que ya contaba con un gran elenco de videojuegos de lucha a sus espaldas, quiso hacer alusión a la revolución con The Last Blade (1997) y su secuela un año más tarde. Un plantel de luchadores que bien podrían ser extraídos de la obra magna de Watsuki, el manga Rurouni Kenshin (Shueisha, 1994), y que sin embargo, más tiene que agradecer a la saga Samurai Shodown (SNK, 1993) por su estilo de combate. Muchos de estos guerreros miden sus fuerzas defendiendo a Tokugawa y otros tantos luchan por el cambio impulsado por Meiji: enfrentamientos armados a sangre fría de un individuo contra otro, en el cual se resalta la belleza del subtítulo del juego «Bakumatsu Roman» —«Romance Bakumatsu»— como si fuera una oda a la vida y la muerte; donde propiciar el golpe más certero asegura una victoria casi antes que una perfecta combinación de botones. El atributo de la «Velocidad» y la «Fuerza» —«Speed» y «Power» en el juego— pasan a segundo plano siempre y cuando uno sepa repeler el golpe de su adversario, que junto a lo dicho anteriormente, hace pensar al jugador qué artimañas usar cuando nuestro combatiente desenvaina el arma.
Como ya hiciera su precuela, The Last Blade 2 nos traslada de lleno a la época de las katanas, los asaltos a la luz de la Luna, los ríos de sangre en calles empedradas y las vigilias cerca del fanal encendido aguardando una transformación en la sociedad, una modernización de la patria, una renovación de la estructura política.
Pixelbits es una sección destinada a recomendar, de forma breve y concisa, clásicos del arcade que en su día se pudieron disfrutar en los salones, y a los que aún hoy vale la pena darles una oportunidad.
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