Análisis del Razer Orbweaver
La gente de Razer nos ha enviado una mezcla de teclado y joystick para jugadores, el Razer Orbweaver, una auténtica chulada para tener el control absoluto de los juegos con la mano izquierda. Para la mano derecha, nos enviaron un ratón Razer Imperator que comentaré en otra entrada.
La presentación es uno de los aspectos que Razer cuida, ya que todos sus periféricos disponen de un buen embalaje, para que la primera impresión del usuario sea positiva.
En la caja nos encontraremos con el Orbewaver, con el manual y con un par de pegatinas. No hay ningún CD ni DVD con drivers, por lo que tendremos que descargarlos desde la página web oficial. Pero no sólo eso, sino que además, para poder activar totalmente las funcionalidades del producto tendremos que registrarnos. La verdad es que yo soy algo reacio a dar mis datos y nunca me había encontrado con un dispositivo que me obligase a hacerlo. Creo que en los productos hardware estas cosas sobran, y quizás en los software también, aunque en este último caso sí pueden tener una mayor justificación.
El software del Orbweaver está disponible para Windows y para Mac y lo cierto es está muy bien. Permite definir y personalizar los botones y macros de una forma visual a través de una interfaz rápida e intuitiva.
El Razer Orbweaver cuenta con 20 teclas programables y con un mando de ocho direcciones para el dedo pulgar. Permite cambiar de forma inmediata entre 8 mapas de teclas, disponer de un número ilimitado de perfiles de juego distintos y crear macros sin límite de longitud.
El diseño del Orbweaver es de lineas futuristas y angulosas, sin mermar la ergonomía. Dispone de módulos reposapulgar, reposamano y reposamuñeca para aguantar largas horas de juego. Por poner un pero en el diseño, las teclas están completamente alineadas entre sí, es decir, no guardan la disposición normal de un teclado QWERTY, lo que a veces puede hacer que uno pulse dos teclas al mismo tiempo. El tacto es bueno y dispone de módulos ajustables para adaptarlo a la mano de cada jugador.
En sus entrañas esconde contactos táctiles de teclas mecánicas Cherry MX Blue, así que cuando las pulsemos oiremos el sonido típico de este tipo de teclados. Para los detractores de estos ruídos, Razer ha lanzado al mercado una versión con el mismo tacto pero silenciosa bajo el nombre de Razer Orbweaver Stealth.
Es un dispositivo muy especial y los jugadores tendrán que dedicar un montón de horas a familiarizarse con este periférico para poder sacarle el máximo partido. La curva de aprendizaje es alta pero la recompensa también lo es. Probablemente sólo ciertos jugadores hardcore serán capaces de exprimir la totalidad del potencial del Orbweaver, mientras que la mayoría utilizarán unas pocas de las múltiples opciones que ofrece.
Además de para los ratos de juego, habrá quien lo quiera para ahorrar espacio en el escritorio y configurar en él los atajos de las teclas rápidas de los programas, especialmente en aquellos en los que escribir sea secundario, como los programas de diseño.
El Razer Orbweaver se encuentra a la venta a unos 130€.
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