Ese invento llamado DLC
A día de hoy raro es el juego que no cuenta con lo que ya se extiende por la comunidad como DLC (véase también Downloable Content o Contenido Descargable). Un sombrero nuevo para tu personaje mago de ese juego del que te aseguran más de cien horas de diversión, nuevos parches horteras para que tu coche sea el más molón en las carreras ilegales donde luchas por conseguir el teléfono de la chica del pañuelo de la salida o todo un spin off sobre la propia aventura de tu juego de rol apocalíptico. En general te aporta más cosas al juego de una manera u otra, enriqueciéndolo por completo y aportando al menos un poco más de interés por él si ya te lo habías pasado y ahora descansaba en el rincón de tu cuarto.
Hasta aquí es todo bastante bonito. En los tiempos donde no teníamos Internet no teníamos DLC. Teníamos expansiones que eran o no eran autojugables. Salían si el juego había sido un éxito y su salida era todo un asombro para aquellos que habían disfrutado de él. (Me viene a la memoria instantáneamente Starcraft y Starcraft:Broodwar). Pero ahora vienen los tiempos de Internet y el DLC, y como las empresas se aprovechan demasiado de este nuevo fenómeno (¿Podemos llamarlo fenómeno?) ligado a los juegos. Porque últimamente muchos de estos DLC que me encuentro me suenan a engaño. A excusa para meter el parche de turno porque no han sabido cerrar el juego consecuentemente o el simple hecho de conseguir sacar el máximo beneficio al juego, cortándolo en pedazos y aprovechando esa cirugía para obtener al menos tres o cuatro DLC. Así un juego como el Fallout New Vegas te cuesta en torno a los sesenta euros (dependiendo de soporte) y luego te aparece un DLC exclusivo para Xbox (de pago claro) que no es más que una excusa para arreglar los fallos cometidos y que encima tiene cierto regusto a “cortado y copiado del juego original” que hace que te quedes de piedra.
Sin duda la guinda se la lleva Dragonage ya que los últimos DLC parecían anuncios de lo que podría ser lo que vendría en su segunda parte aparte de la vasta colección de contenido extra que lo convertían en “Los Sims medievales” (ahora un gorro, ahora un anillo, etc)… Y ya para remate nos anuncian la pre-venta de la esperada segunda entrega y nos dicen que nos regalarán un DLC el cual ya tiene tráiler.
¿Cómo? ¿El juego no ha salido y ya tiene una expansión? ¿Ha venido Trunks desde el futuro o quizás un Terminator y en su mochila traía la DLC que resultaba que había sido un éxito de ventas? Me parece a mí que pillaron al diseñador de niveles y aventuras del DragonAge 2 y le dijeron… “Oye Paco… corta esos niveles y esos de allí, mete dos nuevos personajes y siete nuevas armaduras y lo metemos en un DLC”.
Aún así a su favor he de decir que algunas empresas (normalmente son las más pequeñas) son más abiertas a poner algunos DLC que son verdaderas joyas totalmente gratuitos. Pequeños guiños que hacen que recuperes el interés por el juego o que quizás te haga caer en la tentación de comprártelo; y no hace falta que sea una super aventura de ciento treinta horas más donde podemos rizar el rizo, porque ya se sabe el dicho ese de a caballo regalado…
Esto es como todo, e incluso no es una cosa exclusiva del mundo del videojuego… en el cine lo conocemos como Director Cut y aunque antes solía ser real el hecho de que tuvieran que cortar porque se habían pasado con el metraje o porque el presupuesto no daba para más en post-producción, ahora es como estos DLC que parecen que tienen la etiqueta de “Voy a quedarme contigo” y nos encontramos esas ediciones DVD donde versa “Con doce minutos extra de contenido original” donde en verdad vemos como el jefe de la expedición de marines coloniales se toma un café antes de exterminar a un puñado de pitufos tatuados que guardan el árbol de la princesa Mononoke.
En fin habrá que ver hacía donde se enfoca el camino de las DLC y si seguirá siendo una manera de mantener el vicio en tu juego favorito o si será un engañabobos. Ahora os dejo que penséis qué DLC os han maravillado y cuales habéis maldecido hasta que se os pasó el enfado.
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