Análisis de Need For Speed Pro Street

JakCore21 de febrero de 2008

De las calles a los circuitos, con esta nueva premisa se presenta el ultimo titulo de una saga mítica reinventada hace algunos años en pro de los amantes del tunning. En Need For Speed Pro Street ya no tendrás que vértelas con la policía corriendo en carreras ilegales entre el trafico, eso ahora solo forma parte del pasado de Ryan Cooper, protagonista del modo carrera, y al que deberás llevar ante el éxito arrasando en multitud de eventos.

Básicamente el objetivo del modo principal, y el único exceptuando las carreras personalizadas, no es otro que, desde el mapa de carrera seleccionar uno de estos eventos, denominados día de carrera, lograr victorias en las distintas pruebas que lo forman para conseguir dinero y la posibilidad de acceder a nuevos días de carrera. Estos días de carrera son algo así como eventos de fin de semana en los que la organizadora alquila el circuito y lo ambienta con un Dj, chicas ligeras de ropa, y un comentarista que no deja de dar la brasa repitiendo una y mil veces tu nombre. Eso sí, en un perfecto castellano y con un doblaje más que decente, lo cual es de agradecer.

Las distintas pruebas que forman los días de carrera están divididas en cuatro grupos principales, que vienen a ser: carreras de Grip, Drift, Drag y Speed, aunque todas ellas afectadas en algunas ocasiones por ciertas variaciones.
Las carreras de Grip son, en esencia, carreras tradicionales en las lucharemos por lograr la primera posición; en las de Drift deberemos sumar la mayor cantidad de puntos derrapando con nuestro coche; en las de Drag la aceleración y nuestra habilidad con el cambio serán esenciales, aunque en una de sus variantes, la competición de Wheelie, deberemos lograr la mayor distancia posible con nuestro coche haciendo el caballito; y por ultimo las de Speed, en las que en unas carreteras prácticamente rectas lucharemos por ser los más rápidos a una velocidad endiablada evitando cualquier despiste que destroce nuestro coche.

Las opciones de personalización de los vehículos, sin ser tan amplias como en anteriores entregas, nos permiten modificar tanto el aspecto exterior de nuestro vehículo con distintas piezas, pinturas y vinilos, así como las piezas internas que nos otorgaran mejores características mecánicas las cuales, son esenciales para seguir avanzando, si no queremos gastarnos una pasta en un nuevo vehículo.

En los aspectos meramente técnicos, nos encontramos con una conducción a caballo entre el arcade y la simulación, que simplemente cumple su función sin llegar a ser ninguna maravilla. Los vehículos sufren daños de una forma bastante conseguida, y los mismos afectan directamente al desarrollo de la carrera y a nuestro bolsillo cuando toca reparar el vehículo destrozado. Especialmente destacable es la increíble sensación de velocidad de la que hace gala el juego, sobre todo con coches rápidos en los de desafiós de Speed. El apartado sonoro esta a la altura, con un correcto doblaje al castellano y músicas apropiadas a la atmósfera del titulo.

Gráficamente, me he encontrado con una desagradable sorpresa, en forma, de «bug» con las pantallas 4:3. Me explico, normalmente juego en una pantalla LCD 4:3 que si bien en algunos juegos añade bandas negras no supone ningún problema y ni mucho menos una perdida de resolución que provoca unos dientes de sierra brutales como es el caso de Need For Speed Pro Street. Ante tal situación, y después de configurar la consola en panorámico y liar la de dios con los controles de la tele para que la imagen no quedase estirada, conseguí hacer funcionar el juego a la resolución apropiada en la que los dientes de sierra desaparecían y podía disfrutar del apartado gráfico tal y como fue concebido, que dicho sea de paso, llegan a un nivel muy alto con espectaculares efectos de humo, un modelado notable, y unos circuitos correctos aunque bastante vacíos.

En conclusión nos encontramos ante un nuevo lavado de cara en la saga, que gustara a algunos y decepcionara a otros, pero que no dejan de hacer un juego correcto siempre y cuando no lo tengas que jugar en un pantalla 4:3…