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SEGA en los Juegos Olímpicos de Barcelona 92

No sabemos si los videojuegos van a estar a la orden del día en los Juegos Olímpicos de Pekín, que comienzan el próximo 8 de agosto, pero en los celebrados en Barcelona hace 16 años, fueron una importante atracción para los atletas, gracias a varias espectaculares salas de juegos que SEGA instaló en la Villa Olímpica. Ahora que se acerca una vez más la fiebre del olimpismo es un buen momento para recordar el despliegue videojueguil del que pudieron disfrutar los deportistas en el evento celebrado en la Ciudad Condal.

Según Hobby Consolas (en su número 12, septiembre de 1992) había 200 Mega Drive, 11 máquinas recreativas, 60 Game Gear y más de 1.200 cartuchos. Según el diario El País, en una noticia del 24 de julio de 1992, las salas constaban de 400 monitores con sus respectivas máquinas, 30 consolas portátiles y 11 grandes máquinas recreativas. Datos que no coinciden del todo pero que se bastan para evidenciar el espectacular despliegue realizado por la compañía de juegos nipona en la Villa Olímpica de Barcelona ’92.

Según apuntaba El País, más de 500 personas visitaban diariamente las salas de ocio habilitadas con videojuegos. Teniendo en cuenta que la cifra total de atletas participantes en los juegos ascendió a 9.364, es una proporción más que considerable. Pero también hay que tener en cuenta que había otras opciones de ocio que hacían competencia a los videojuegos: bolera, cine, biblioteca, bares musicales, discoteca, playa, scalextric… en fin, que entre entrenamiento y entrenamiento, difícilmente podrían quejarse los deportistas de que se aburrían.

En total fueron 5 las salas que SEGA llenó de consolas y arcades. En la principal estaban varios espectaculares arcades, como el Galaxy Force II, el Time Traveller o el impresionante R-360º, del que podéis ver más detalles en este post sobre algunas espectaculares recreativas de SEGA. En esta última máquina fueron tales las colas, que los organizadores se vieron obligados a repartir papeles con un número con el turno, para que todo el mundo pudiera montar. El propio príncipe Felipe de Borbón, que visitó la sala, no pudo resistirse a echar una partida en tan espectacular arcade.

Jordi Sala, uno de los organizadores del despliegue de SEGA, declaraba a Manuel Serras, de El País, lo siguiente: “por aquí pasan más de 500 personas diarias. La cifra ascenderá notablemente cuando la villa esté a pleno rendimiento. Los japoneses y norteamericanos son los más asiduos. Pero hay también muchos europeos. Africanos y árabes vienen poco”. Ignacio Rodríguez, director de ocio y cultura en los Juegos, declaraba por su parte que: “Si los deportistas no se entrenan, a mí no me preocupa. Quiero que se diviertan […] La mayoría de los que están aquí saben que tienen pocas opciones de ganar, así que por lo menos intentaremos que se lo pasen bomba”.

La verdad es que más de uno se debió volver contento a casa aunque lo hiciera sin medalla, y es que parece difícil encontrar un sitio mejor para tomarse unas vacaciones. Vamos a ver que hacen en Pekín el próximo mes, que ya sabemos que a los chinos les gusta hacer las cosas a lo grande. Puede que los atletas se ahoguen en la polución y el tema político perjudique las cosas, pero prometen ser unos Juegos Olímpicos absolutamente espectaculares.

Las fotografías, salvo la de la R-360, pertenecen al evento, y están sacadas de la cobertura que la revista Hobby Consolas hizo del evento allá por sus inicios en 1992. La primera muestra cómo Sonic recibía a los visitantes. En la segunda podéis ver a un deportista que según los redactores se tiraba todo el día jugando al Desert Strike. En la tercera está el espacio que ocupaba el R-360. Finalmente, la cuarta muestra a un deportista que, dada su envergadura, tenía problemas para introducirse en uno de los arcades.

Fuentes: El País, 24/07/1992 (hemeroteca) – Hobby Consolas nº 12 (edición impresa, septiembre de 1992).