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The Gamer Inside dedica su cuarto piloto a documentar la industria española del videojuego

La industria del videojuego en España era algo que no podíamos dejar de tratar en The Gamer Inside, historias de personas luchadoras, de fracasos sonados, triunfos inesperados, talentos desaprovechados…, pero sobre todo visionarios, emprendedores que un día decidieron lanzarse a un terreno inexplorado, armados con ilusión y fe ciega en ese producto incipiente y complejo llamado videojuego. Como pescador que sale a la mar sin saber si al final del día tendrá buen tiempo o una tempestad, ahí estaba, en los 80s, una prometedora industria española que hacía las delicias de una joven generación de apasionados a la informática, algunos de los cuales aún hoy día uno puede encontrar implicado en la producción del videojuego nacional.

Si hay algo que puedo atestiguar desde los ya más de quince meses que comencé este trabajo, eso serían las toneladas de creatividad y talento con las que contamos y hemos contado en España, algo que extrañamente se conoce por parte de la gran mayoría de los consumidores de videojuegos en nuestro país. Y es que para tener una visión completa de la industria española del videojuego, no sólo es necesario hablar con los protagonistas de antaño y actuales, sino también echar la vista hacia afuera y darnos cuenta del pequeño punto que todavía representamos en el panorama global. En este competitivo mercado del videojuego, muchos son los españoles trabajando en el extranjero, y más en estos tiempos de crisis, pero en el sector del videojuego emigrar es una palabra que resuena más que en otros campos, y eso es porque aún estamos en camino a la creación de un tejido empresarial lo suficientemente poblado y cohesionado como para absorver el cada vez mayor número de trabajadores que se forman en nuestro país. Quizá al videojuego español le haya faltado confianza por parte de los inversores a lo largo del tiempo, aunque por fortuna en los últimos años se han producido cambios importantes en la industria: Los modelos de distribución digital con un menor coste de distribución y de licencias de desarrollo, la rentabilidad de proyectos más sencillos orientados al enorme mercado que se ha creado en las plataformas móviles, el crecimiento de la oferta en lo referente a formación en desarrollo de videojuegos, la consideración del videojuego como producto cultural por parte de las instituciones, estas son sólo algunas muestras de que poco a poco nos movemos en la buena dirección.

Otra barrera con la que teníamos que luchar en las pasadas décadas era la ignorancia e incluso temor que provocaba el ocio interactivo a determinados sectores de la prensa; hoy día, afortunadamente el videojuego ha comenzado a verse de forma distinta por la prensa generalista, y en consecuencia por una parte importante de la opinión pública. Un ejemplo reciente de ello, y que hubiera sido muy chocante hace unos años, ha sido el Príncipe de Asturias que se otorgó hace pocos días a Shigeru Miyamoto, uno de los estandartes de esta industria desde hace décadas.

Para contar todos estos devenires de esta jóven y cambiante industria, este pasado 5 de mayo estrenamos en RetroMadrid el capítulo piloto del canal dedicado a la industria, en el cual narramos con cierta perspectiva y a grandes pinceladas, cómo ha ido formándose y evolucionando el ecosistema necesario para dar vida al videojuego español (la prensa, la distribución, venta, desarrollo), así como las principales cuestiones que preocupan a sus protagonistas. Este capítulo representa la cuarta y última entrega de esta primera temporada, a partir de aquí vamos a tomarnos un descanso que servirá para plantearnos la mejor forma de desarrollar la serie, esperamos mostraros nuevo material antes de concluir el año, entretanto os mantendremos informados de cara a futuras novedades del proyecto.