Knights of the Round
¿Dynasty Warriors? No. Mucho antes ya existía el ansía de los chavales por machacar a miles de enemigos sólo con un personaje y su fiel arma. Knights of the Round es un arcade de Capcom del año 1991 que también tuvo su versión de SNES en el año 1994. La verdad es que conversión a la 16 bits de Nintendo es buena, pero nada tiene que hacer con la maquina recreativa, que a todos nos hacía pedir 5 duros a nuestros padres para quemarlos en 10 minutos (o menos).
Aunque es un “beat’em up” (golpea a todo lo que se mueva), no lo es al uso, porque cuenta con ciertos toques de rol, puesto que al subir niveles el aspecto del personaje y de las armas cambian a mejor, pero sin poder decidir que parámetros subir. Eso es automático (y una faena).
Historia
El juego está basado en la Leyenda del Rey Arturo y los Caballeros de la Mesa Redonda:
Arturo extrae una espada especial (Excalibur) de una roca, que nadie más puede sacar, y desde entonces tendrá que liderar a su pueblo para alcanzar la paz. Pero el problema es el caos acumulado, que ha ido creciendo durante la búsqueda del líder. La única forma de que todo finalice bien es encontrar el Santo Grial, que yace escondido durante varios cientos de años.
El juego
El juego se desarrolla en un ambiente correcto, todo casas de madera y paja, castillitos, y todo muy mágico. Se puede decir que da el pego. Algunos escenarios se repiten bastante, pero la acción es tanta que casi ni te fijas.
Puedes escoger entre tres personajes de la Leyenda del Rey Arturo. Son Lancelot, Percival y el propio Rey Arturo. Es un clásico la elección de tres personajes en este tipo de juegos, y como ejemplo tenemos Cadillacs & Dinosaurs, o Final Fight. A muchos les pasará que como había docenas de juegos de este tipo, pues daba igual uno que otro. Pero este introducía aspectos nuevos.
Los efectos de sonido una cosa aparte. Los golpes hacían su propio sonido, pero no se sincronizaba con el propio golpe. Podías hacer 5 golpes, y sonar el efecto como 7 veces. Una faena. Y el sonido de fondo no dejaba nada a la imaginación. Sonidos genéricos del montón. De vez en cuando sonaba algún grito, que te animaba, pero nada más.
La jugabilidad en cambio compensaba. Los personajes se movían de lujo, incluso el lento era rapidillo atacando y daba la impresión de ser superpoderoso. Gracias a eso querías acabar con cada vez más y más enemigos. Pero no era así, después de ir por 50 pelas, y no haber llegado ni a un 25% del juego.
Es la primera vez en un juego de estos, que se puede bloquear un ataque. Si pulsamos atrás y el ataque normal a la misma vez, podremos bloquear con el arma por delante, pero pueden pasar dos cosas: si bloqueamos un ataque, seremos invencibles durante unos segundos; pero si fallamos el bloqueo, nos cansaremos y seremos vulnerables hasta recuperar el aliento.
También se pueden montar caballos, y podrás atacar desde él, e incluso embestir o
saltar sobre tus enemigos.
Personajes seleccionables
Arturo es el personaje mejor equilibrado. No es el más ágil ni el más fuerte, pero por ahí le anda. Tiene a Excalibur con él, pero es anecdótico, porque no tiene relevancia en el juego. Lleva una armadura compacta en un principio, que se va convirtiendo en una armadura de cuerpo completo.
Lancelot es el personaje más ágil de los tres. No hace mucho daño, pero puedes moverte muy rápido por la pantalla y esquivar multitud de ataques. Empieza usando unas ropas azules, pero también acaba con una armadura de cuerpo completo.
Perceval es el personaje más fuerte. Blande un hacha a dos manos y puede correr. Al principio solo tiene una protección en un hombro, pero al final se convierte en una armadura parcial.
Conclusión
Si te gusta este tipo de juegos, aprovecha, y cárgalo ahora mismo con el emulador que más te guste y pasarás unas 2 horas y pico disfrutando de lo lindo. Ahora no tienes porque dejarte un dineral en terminártelo.
Lo que más me gusta.
- Ver como van cambiando de apariencia los personajes, y matar a esos payasos saltarines, ¡dios que odio les tengo!
- Poderlo terminar de una sentada en el emulador. En las recreativas era IM-PO-SI-BLE.
Lo que menos me gusta.
- El sonido, y los efectos de sonido. Cutres, cutres.
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