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Análisis de ATV Offroad Fury 4

Sony nos ofrece el cuarto episodio de ATV Offroad Fury, la culminación en Play Station 2 de una interesante saga de motor de la pasada generación, caracterizada por su gran jugabilidad y la posibilidad de manejar quads. Este juego nos llega un poco tarde con respecto a Norteamérica, donde se puso a la venta en 2006, pero su lanzamiento, aunque sea con retraso, vale la pena.

Desiertos, bosques, llanuras, selvas, pistas de cross y otros lugares de lo más variado están esperando a que los recorramos pisando el acelerador a fondo en el juego desarrollado por Climax, que presenta la nada despreciable cifra de 72 circuitos, ubicados en diferentes parajes del mundo.

Uno de los aspectos más interesantes de ATV Offroad Fury 4 es que presenta cuatro tipos distintos de vehículos, y todos ellos con bastantes diferencias a la hora de conducir, lo que sin duda da mucha más vida al juego. Buggys, motos de cross, todoterrenos 4×4 y los quads o ATVs que dan nombre al juego está disponible para conducir en los múltiples circuitos a nuestra disposición, con lo que fans de cualquiera de las cuatro disciplinas encontrarán lo que buscan en un mismo juego. Además, tenemos a nuestra disposición un taller en el que ajustar a nuestro gusto diferentes aspectos en la mecánica de los vehículos, para adaptarlos a nuestras necesidades en carrera.

Por otra parte estaremos bien servidos de modos de juego, pues además de las numerosas variantes que presenta el Modo Clásico (Supercross, Rallycross, Nacional, Estilo Libre, Circuito y P2P), se ha introducido un Modo Historia, en el que trataremos de llevar a nuestro personaje hasta lo más alto de la competición. Pero esto no es todo, y es que el juego cuenta también con un editor de circuitos, que requiere mucha paciencia pero que da unos resultados muy buenos, y un modo multijugador a pantalla partida con el que podremos competir contra otros tres amigos en cualquiera de las cuatro categorías de vehículos. Por el camino se ha quedado el modo online de la versión americana, una lástima.

La Inteligencia Artificial de las máquinas no presenta nada sorprendente, y aunque a veces nuestros rivales nos empujarán o cerrarán para que no podamos adelantarlos, no son demasiado inteligentes. De todos modos, el nivel de dificultad está bien ajustado, y nos encontraremos ganando carreras desde el primer día, pero también con difíciles retos para cuando dominemos mejor el juego. Entre los circuitos también hay de todo, desde algunos muy simples a otros repletos de horquillas y saltos que nos obligarán a una conducción muy cuidadosa, máxime teniendo en cuenta que nos pueden descalificar como cojamos algún atajo involuntario.

Otro aspecto interesante del juego son las piruetas que podemos realizar sobre los vehículos, de entre una larga lista, y con las que sumaremos puntos que luego podremos usar para introducir mejoras en los vehículos. También con los derrapes podremos sumar puntos extra.

De los aspectos técnicos del juego podemos hablar bastante bien, pues su apartado gráfico, sin sorprender, presenta un nivel alto y al que apenas se le pueden poner “peros”. Todo se mueve muy correctamente, casi no hay popping y los fondos se generan al instante y con pocos problemas. Los escenarios tienen unas dimensiones más que considerables y son variados, presentando además unas aceptables texturas, auque en ciertas superficies resulten mejorables. Los efectos son francamente buenos, como el polvo o el agua, y los vehículos se van deteriorando y ensuciando a medida que avanza la carrera, de una forma muy realista.

De los aspectos sonoros podemos destacar unos efectos de motores, derrapes y choques que nos harán sentir como si estuviésemos en verdad al volante de uno de estos vehículos. La música, por su parte, es muy cañera y encaja estupendamente en un juego de velocidad; son temas de rock alternativo en su mayoría, pero su calidad es alta, así que, salvo que este estilo no os guste nada, seguro que no querréis bajar el volumen de la música y dejar sólo los efectos.

El control llama la atención rápidamente por lo sencillo que resulta dominar los vehículos, pero aunque el juego haya quedado bastante arcade por la facilidad de su control, la física de los automóviles es muy realista, y si nos pasamos con un derrape nos iremos fácilmente al suelo. Pero esta jugabilidad es una de las grandes virtudes del juego, pues divierte desde la primera carrera y convierte al multijugador en una buena opción para pasarlo bien con colegas aunque éstos se pongan ante el juego por primera vez.

La gran cantidad de posibilidades, vehículos y pistas disponibles hacen que ATV Offroad Fury 4 tenga cuerda para rato, ofreciendo muchas horas de diversión, ya que además las carreras resultan bastante emocionantes e intensas. El Modo Historia es otro aliciente, aunque podía haber dado más de sí, pero el resto de modalidades compensan de sobra y suponen una oferta satisfactoria.

También hay que señalar que el juego presenta la posibilidad de conectarlo a una PSP por USB, y si tenemos el ATV Offroad Fury Pro en la portátil de Sony podremos intercambiar información entre ambas versiones, lo que nos puede permitir desbloquear algunos extras.

Teniendo en cuenta que en el ATV Offroad Fury 3 únicamente había quads y no contaba con modo Historia, el nuevo episodio se convierte en una buena opción incluso para aquellos que ya habían adquirido el anterior, pues las posibilidades de juego se han multiplicado. No es un juego que vaya a marcar una época porque no destaca de forma sobresaliente en nada, pero el equilibrio en todos sus apartados, la variedad que ofrece y la diversión que proporciona lo convierten en un juego recomendable.

LO MEJOR

+ Cuatro tipos distintos de vehículos
+ Control muy sencillo y cómodo.
+ Gran cantidad de modos de juego.
+ Buena realización técnica.

LO PEOR

– Le han quitado el online.
– El Modo Historia es mejorable.
– No llega a despuntar.